lunes, 16 de junio de 2014

Pun-ta Ca-ní

Cuando Britany Loreal, Lakuki, Heliuss Superser y yo nos vamos a la playa, nos transformamos en la pandilla basurilla y, cada uno de nosotros, adopta un papel específico.

No se sí ya os lo había dicho pero, nosotros, bebemos un montón.

Ahora imagino a Lakuki, leyendo esto y diciendo: " oyeee no digas eso, que tampoco es para tanto" los cojones, bebemos y es para tanto y más.

Yo creo que empezar con las cervezas a las 11,30 de la mañana es de preocupar y yo siempre pregunto: " perooooo esto es malo, no?" Y la respuesta de Heliuss Superser es siempre la misma: " que va, el vino es bueno para el corazón y la cerveza para el riñón". Así que ya me quedo más tranquila y me abandono al placer de las uvas en estado líquido.

 En una de las comidas, de este fin de semana playero, decidimos que no podíamos ir a NY, nunca. Tenemos un problema y es qué, cómo os contaba antes, los 4 juntos adoptamos roles que nos impiden entrar a ese país.

Nosotros no hemos cruzado nunca el charco pero, como en todo, siempre está la amiga de o el primo Alfredo, que ha ido de viaje y por llamarse García se ha quedado retenido un rato en el aeropuerto. Así qué nosotros lo tenemos claro, no vamos, no vamos a ir nunca.

Britany Loreal y yo somos enfermos, los dos. La suya tiene cura, porque se puede cambiar de acera, pero la mía no. Yo creo que a mi me acusarían por atentar con la salud pública y ser la causante de una epidemia dermatología ( soy una mujer divorciada y tengo psoriasis).


Heliuss Superser es como un talibán y claro es que a él, directamente,  nos lo detienen pero en Barajas. No entiende que la barba tan larga es muy hipster y muy de moderno pero da mucho calor y con ella no se podrá montar nunca en un avión.

Y luego tenemos a la cuarta en discordia, Lakuki, que la pobre es negra como el tizón ( cuando volvemos de la playa, sólo le preguntan a ella como se lo ha pasado.  Sobran comentarios, no?) y entre su color de piel y un apellido bastante hispano pues no os cuento como acaba esta pobre.

Así qué nosotros nos quedamos en Pun-ta Ca-ní que es como hemos bautizado al pueblito tarraconense donde nos hemos dedicado a beber y comer.

Y hasta aquí quería llegar yo, al verbo " comer".

Britany Loreal y yo hemos decidido  que queremos adelgazar y, después de esta jartada de fin de semana,  nuestro lema es " de focas a sirenas". Con esta dieta milagrosa, en trece días, no nos conoce ni Rita. Cambia el metabolismo y en 3 años no engordas. Esto nos tiene impactadas.

No se cómo acabaremos y ni sí llegamos al quinto día porque hoy teníamos que comer espinacas y ella, por despiste, ha comprado 3 kilos de acelgas ( la cantidad no importa).

2 comentarios:

  1. Chica yo no creo que bebais demasiado.Lo que pasa es que segun con que personas te juntes es algo que se activa y una cosa lleva a la otra y sin darte cuenta te has bebido hasta el agua de los floreros y llevas un pedete majisimo....por eso a mi me encanta quedar contigo pq es lo q nos suele pasar cuando estamos juntas...deseando estoy ya leer tu blog de las proximas fiestas del torico. Madre que peligro!!!!!!

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