martes, 5 de agosto de 2014

Nuevo año

Diciéndole hola a Agosto pienso ya en el adiós a este año raro de mi vida.

En mi trabajo, los años son cursos académicos así que, después de estos próximos días de playa, con familia y amigos, comenzará, para mí, el nuevo año.

Septiembre.

Con mi nueva mochila, te espero.

Mochila llena de los de siempre, los incondicionales que permanecéis a mi lado pase lo que pase.

Llena de nuevas y maravillosas personas que he ido encontrando durante este tiempo.

Llena hasta rebosar, de toda la ilusión necesaria para retos ( complicados, porque si no dejarían de serlo, pero que no me dan miedo) y todas las ganas de seguir disfrutando cada día, como si fuera el último.

Te espero, dando patadas a todo lo feo y gris que me ha rodeado hasta hace dos días.

Patadas a los que han decidido irse sin decir adiós, a lo que lo han dicho pero me importa una mierda que se hayan despedido, a los tristes e infelices, a todos los que están vacíos.

Te espero con una sonrisa, ansiosa, por lo nuevo que traerás.

Con tu olor a Otoño, con los viajes programados y los que no lo están, con los cafés a media tarde, con días de sofá y manta, con horas de cine y grandes dosis de palomitas, con las últimas cenas de verano, con tus despedidas y tus reencuentros, con las citas programadas y las citas a ciegas, con todo esto y mucho más, te espero Septiembre, con los brazos abiertos.

8 comentarios: